BALAUSTRADA DE UNA MENTE ENFERMA...

viernes, 19 de abril de 2013

DIARIO ABSTRACTO: Regreso

Sin ganas y sin esfuerzo. Sin nada que decir pero con todo por contar.
Atemorizado por el futuro en un presente aniquilante.

Miro mis manos vacías que ya no claman al cielo y pienso que soy un perdedor.
Y cada doloroso despertar me recuerda que estoy en lo cierto,
que soy el ganador del concurso de mi propia miseria.

No soy lo que fui. Ni por asomo.
Jamás lograré reflejarme en un espejo que ya no existe.

Nunca más se impondrá el impulso al raciocinio.
Y seguiré siendo ese ente triste y arrastrado que a duras penas se sostiene erguido.
Alicaído y torturado. Involucionado.

Incapaz.

De dar forma al mundo a mi alrededor. De superarme. De satisfacer a los demás.
De cobijarme cuando la tormenta arrecia. De reparar el daño que causo.
De vomitar todo el dolor que trago. De alimentar alguna esperanza, aunque sea vana.
De advertir del peligro al que se despeña. De acabar con todo y echarme tierra encima.

Ni siento ni pienso. Mejor así, ignorante de todo. Despreocupado.
Cubiertos los ojos de barro para tropezar mil veces y llegar a la meta el último.
Como siempre.

Y todos tenéis razón.
Soy el deshecho, lo prescindible, la equivocación en la operación aritmética más simple.
Una causa de hilaridad perpetua.

Hastiado del esfuerzo de ser yo mismo, he regresado.
Una obligación innecesaria. Una más. Pero cumpliré con la tarea.
A pesar de todo lo dicho. Sin ganas y sin esfuerzo.